Barack Obama y la política exterior de los Estados Unidos han cubierto las portadas noticiosas de los principales medios de comunicación alrededor del mundo.
En Lausanne, Suiza, se acordó trabajar en la elaboración de un acuerdo que pretende finalizar con la distancia diplomática, de más de treintaicinco años, entre la potencia norteamericana e Irán. Negociaciones políticas que pone en tela de juicio el potencial nuclear de Teherán, así como el control geopolítico de la república iraní en Oriente Medio.
Es innegable que los Estados Unidos han cometido falencias incuestionables en la región, especialmente, en las dos últimas décadas. Errores que han desequilibrado la balanza de poder tanto de las naciones occidentales como medio orientales, entre ellas, Arabia Saudita, Jordania, Irán, Siria e Irak.
Estas fallidas estrategias políticas y militares en la zona han, consecuentemente, fortalecido al régimen iraní, así como a aquellas organizaciones insurgentes responsables de la desestabilización mundial a través de la utilización del terror, la violencia y actos de barbarie.
De ahí, una parte importante de la opinión pública se cuestiona sí es un error político de los Estados Unidos levantar las sanciones económicas impuestas al régimen iraní: medidas regulatorias a la carrera armamentista y la ambiciosa escalada nuclear de Irán en una zona de alta turbulencia política y militar.
Se puede pensar que no solamente se trata de un fortalecimiento del régimen iraní, sino, también, de un debilitamiento de los Estados Unidos en la región, debido a sus erradas estrategias y mal manejo diplomático y militar: una logística desvinculada a la realidad cultural de estos pueblos de Oriente Medio diametralmente distantes de la cultura occidental.
Por eso, una vez más, las recientes medidas acordadas entre las principales naciones de Occidente e Irán son, hasta cierto punto, un reconocimiento del otro como actor, como un par en la arena política internacional, en un siglo veintiuno donde la balanza de poder política está sufriendo importantes transformaciones.