Carlos Rodríguez Nichols
Hoy el mundo celebra una gran decisión: el respeto a los seres humanos en el más amplio sentido de este concepto. Respeto es tolerancia y aceptación de las diferencias de género, de credos religiosos, de inclinación sexual, de razas y de ideologías políticas.
Una decisión con la que, de hoy en adelante, deben convivir tanto los sectores de la sociedad más beneficiados de ella, así como aquellos que, incluso en este momento de celebración, no comparten esta legislación.
Respeto es comprender la existencia de diferentes posturas y pensamientos. Por eso, a la hora de celebrar no hay que caer en un acoso psicológico contra aquellos grupos que manifiestan una postura contraria a la de los más beneficiados de esta importante decisión.
Uno de los aspectos más positivos del respeto a la diversidad humana consiste en trasmitir un mensaje que diste de agresión y violencia, de acoso físico y emocional departe de un sector que pretende, por medio de la fuerza, tener dominio sobre los otros.
El bullying escolar y laboral es la próxima meta que la sociedad debe erradicar de los centros educativos. Una lucha, especialmente, de aquellos que de una forma u otra han sentido desprecio y hoy han ganado una batalla: con gran orgullo el mundo celebra el respeto a la diversidad.